Ventajas de los pavimentos de madera frente a pavimentos de otros materiales.

    Para seleccionar un tipo de pavimento o parquet deberán tenerse en cuenta las propiedades o prestaciones que nos ofrecerán cada uno de los diferentes productos disponibles en el mercado y el uso concreto que nosotros vayamos a darle. Además de seleccionar un diseño que satisfaga, a continuación citamos algunas de las ventajas del suelo laminado frente a otros pavimentos.

AMPLITUD DE DISEÑOS Y TONALIDADES. ACABADOS CON TEXTURA Y REALISMO

Dentro de los diferentes materiales que se pueden usar los suelos laminados presentan la mejor relación calidad precio. Su evolución durante los últimos 15 años ha llevado el producto a un nivel de realismo similar a los parquets de madera o multicapa. También se pueden adquirir suelo laminado de cerámicas o piedras con la ventaja de su fácil instalación y calidez al tacto, sin perder realismo.
Esta es una de las importantes ventajas del suelo laminado, que nos permite seleccionar entre la amplia oferta de diseños y acabados que ofrece.
Además deberán prestar especial atención a otras consideraciones importante para la vida del producto.

MUY BUENA RESISTENCIA AL DESGASTE SUPERFICIAL

La actividad que se vaya a realizar en el espacio determinará en gran medida el desgaste y agresiones que el suelo va a sufrir. Como explicamos en el anterior post dentro de los suelos laminados existen diferentes calidades en cuanto a prestaciones de durabilidad y resistencia al desgaste que debemos analizar y determinar si son adecuadas para nuestras necesidades.

Los suelos laminados presentan una mayor resistencia al desgaste por abrasión, impacto y rayado que otros tipos de pavimentos. Dentro de los mismos se establece una clasificación normalizada según la resistencia a la Abrasión y al Impacto. Los suelos laminados Faus se encuentran clasificados como de alta resistencia a la Abrasión AC5 y al impacto Clase 32, 33 con lo que son adecuados para su instalación en cualquier estancia de uso doméstico o comercial.

Otra característica determinante para la selección de un suelo laminado frente a otras opciones es su extremada dureza superficial. En el caso de tarima maciza o parquet multicapa, si la madera utilizada no presenta una elevada dureza superficial aparecen defectos por hendiduras ocasionadas por piedrecillas u otros materiales presentes en las suelas de los zapatos. Estos defectos son apreciables en suelos de madera instalados en zonas de paso de comercios, oficinas o entradas de viviendas.
Los suelos laminados Faus presentan una dureza superficial elevada, comparable a las maderas más duras del mercado.

BUENA RESISTENCIA A LA HUMEDAD. SOPORTE HDF

Un factor importante que determina la vida del suelo son las condiciones de humedad existentes en el espacio a pavimentar. En determinadas aplicaciones domésticas como pueden ser las cocinas o estancias próximas a terrazas exteriores, se requiere que el soporte del suelo laminado a instalar presente propiedades hidrófugas elevadas con el propósito de evitar apertura de juntas e hinchamientos.

El suelo laminado Faus se caracteriza por poseer un soporte hidrófugo HDF que garantiza la estabilidad dimensional, una protección en las juntas por medio de un biselado protector o jointguard y una unión entre piezas con un lock de los más resistentes del mercado. Todo ello contribuye a asegurar la vida prolongada del suelo laminado en perfectas condiciones a lo largo del tiempo.

Además la gama dispone de una colección específica, Faus Blue, cuyo soporte HDF está diseñado con una composición especialmente resistente a la humedad que presenta los menores coeficientes de hinchazón del mercado. Precisamente esta característica lo convierte en un producto ideal para espacios de la casa donde las atmosferas húmedas se dan con cierta frecuencia, un ejemplo de estos espacios son las cocinas.

NO DECOLORA CON EL TIEMPO NI LA LUZ SOLAR

Aunque la instalación del suelo se lleve a cabo en el interior de una vivienda o espacio comercial, con mucha frecuencia las ventanas dejan paso a la luz solar que incide directamente en el revestimiento.
Ante este tipo de fenómenos, los suelos laminados no presentan variaciones de color con el tiempo. La tarima y los parquets multicapa pueden presentar variaciones notables de color de unas zonas a otras del local según las condiciones de iluminación o presencia directa de sol. En el caso de seleccionar este tipo de suelos de madera tenga en cuenta esta característica.

FÁCIL MANTENIMIENTO

El suelo laminado no requiere ningún mantenimiento específico. El producto se caracteriza por poseer un tratamiento superficial de gran dureza que extrema su durabilidad y lo protege de las agresiones de modo que el suelo no sufrirá alteraciones que debamos subsanar con algún mantenimiento específico.
No sucede lo mismo con las tarimas de madera natural, que por ser más sensibles a los agentes externos requieren ser acuchillados, lijados, emplastecido o barnizados
Además es importante destacar que, en el caso de que tuviéramos algún problema, el suelo laminado permite la sustitución de lamas sueltas de forma sencilla. Al realizar esta sustitución en otros tipos de suelos normalmente es necesario efectuar un lijado y barnizado de toda la superficie para igualar el acabado.

RESPETUOSO CON EL MEDIO AMBIENTE

En todas las tipologías de suelo es importante tener en cuenta las emisiones volátiles de productos orgánicos al aire ambiente que producen las materias primas usadas (maderas, resinas, barnices, ..). Para garantizar que estamos ante un producto de calidad debemos prestar atención a los sellos o certificados de emisiones al aire interior. Aquellos productos que estén catalogados como A+ garantizan un nivel de emisiones muy bajo de las sustancias clasificadas como nocivas por la normativa del Parlamento Europeo. Los suelos laminados Faus poseen el certificado A+ emitido por el instituto alemán EPH.

BUEN COMPORTAMIENTO AL FUEGO

Cuando adquirimos un material de construcción o decoración para uso interior debemos asegurarnos de que en caso de incendio se comportará adecuadamente no propagando las llamas y no emitiendo humos o vapores nocivos. Para ello la reglamentación clasifica la reacción al fuego como la contribución al desarrollo del mismo. Los productos se clasifican desde no combustibles, hasta combustible con contribución alta, pasando por una serie

El suelo laminado Faus está clasificado como BFL S1 que indica material para suelos (FL), combustible con contribución al desarrollo del fuego muy limitada (B) y humos de baja opacidad (S1).

ANTIESTÁTICO

Otra característica que se debe tener en cuenta al seleccionar un suelo es su comportamiento como disipador de la electricidad estática. De todos es conocido que los materiales aislantes como la madera o los textiles presentan un buen aislamiento térmico (suelos calientes frente a las piedras que presentan superficies frías), pero esto está relacionado con su bajo poder conductor de la electricidad. Por ello en algunos productos se incorporan aditivos para disipar la electricidad estática que se pueda generar con el roce al andar sobre los mismos.

- Bisel: En 2 o 4 lados, los suelos de madera nos ofrecen uniones protegidas con los más avanzados procesos de protección a la humedad. Además, su exclusivo modo de fabricación evita el estancamiento de suciedad.

- Certificación madera FSC: Garantiza la procedencia de la madera de bosques de bosques gestionados de madera sostenible, además del respeto a los trabajadores, así como la biodiversidad y el control de la caza furtiva.

- Certificación madera PEFC: Se refiere a los suelos de madera que se encuentran dentro del Programa para el Reconocimiento de la Certificación Forestal, mejorando las condiciones del medio rural.

- Compatibilidad con calefacción radiante: Muchos de los suelos de maderas están indicados para ser instalados sobre el sistema de calefacción radiante, debido a su resistencia y fabricación.

- Resbalicidad: Otra de las características que podemos encontrar en los suelos de madera es su resistencia al deslizamiento, resbalamiento de las lamas sin pulir, conocido como USRV (el mínimo requerido por la Unión Europea es un índice de 45). Mientras, también encontraremos suelos antideslizantes cuya distinción es la etiqueta DS.